Los océanos cubren más del 70% de la superficie de nuestro planeta y son vitales para la vida en la Tierra. No solo proporcionan una parte significativa del oxígeno que respiramos, sino que también son el hogar de una biodiversidad inmensa y ayudan a regular el clima global. Sin embargo, nuestras actividades diarias, incluido el uso de productos de higiene, están teniendo un impacto negativo en estos ecosistemas vitales.
Los productos de higiene personal y de belleza, desde champús hasta cremas y desodorantes, a menudo vienen en envases de plástico de un solo uso que terminan en nuestros océanos. Estos plásticos pueden tardar cientos de años en descomponerse, liberando químicos nocivos y microplásticos eternos que afectan a la vida marina y la calidad del agua. Además, muchos de estos productos esconden en su composición microperlas de plástico que llegan directamente al mar por nuestros lavabos y son cócteles de químicos nocivos para nuestra salud y la de los ecosistemas marinos.
Entonces, ¿Qué podemos hacer para reducir nuestro impacto en los océanos? Aquí hay algunas acciones que cada uno de nosotr@s puede tomar:
1.Optar por productos sólidos, en envases biodegradables y reutilizables
Algunas empresas están innovando con productos de higiene en formatos sólidos o en envases de papel o bioplásticos, que reducen la dependencia del plástico y su impacto en el medio ambiente. Hoy en día puedes comprar productos de higiene del hogar y cosméticos a granel, reutilizando envases sostenibles. Los envases son uno de los mayores causantes de la contaminación por plásticos de los mares.
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Usar productos ecológicos, naturales y libres de microplásticos
Elegir productos con certificaciones ecológicas basados en ingredientes naturales puede disminuir la contaminación química en el agua. Estos productos están diseñados para minimizar su impacto ambiental y son una mejor opción para nuestros océanos. Presta atención a las “microperlas” (microplásticos) que encontrarás en dentífricos, exfoliantes, detergentes… Su niveles de contaminación son abismales y negarnos a usarlos está en nuestras manos.
Algunas de las certificaciones ecológicas:
Además, da un paso adelante y rechaza el uso de toallitas y discos desmaquillantes hechas de fibras de plástico y pásate a las alternativas reutilizables y de fibras naturales. De la misma manera, elige opciones reutilizables como copas o bragas menstruales para la regla.
Antes de continuar, preguntémonos sobre los impactos en nuestra propia salud. En la salud humana. ¿Nos afectan directamente?
Impactos en la salud humana
Los aditivos químicos presentes en los recipientes o en la composición de los productos de higiene genera un impacto directo en la salud humana, ya que funcionan como disruptores endocrinos. Los disruptores endocrinos (DE) son sustancias químicas capaces de interferir con el sistema endocrino, afectando negativamente la salud de los seres vivos y la biodiversidad. Estos compuestos pueden imitar o bloquear las hormonas y alterar los procesos hormonales, resultando en efectos perjudiciales para la reproducción y el desarrollo de diversas especies.
En el ámbito de los productos de higiene, los DE se encuentran frecuentemente en plásticos, conservantes, fragancias y otros aditivos. Su presencia no solo afecta a los consumidores, sino que también tiene un impacto en la biodiversidad cuando estos productos entran en contacto con el medio ambiente, ya sea a través de las aguas residuales o como desechos sólidos.
Por otro lado, los microplásticos, definidos como partículas de plástico menores a 5 mm, han sido una preocupación creciente debido a su capacidad para persistir en el medio ambiente y acumularse en la cadena alimentaria. Estas partículas pueden provenir de la degradación de plásticos más grandes o ser añadidas intencionadamente a productos como exfoliantes y cosméticos. La ingestión de microplásticos por parte de la fauna silvestre puede conducir a la obstrucción física, toxicidad y transferencia de sustancias químicas nocivas.
En respuesta a estas preocupaciones, la Unión Europea ha tomado medidas legislativas significativas. Recientemente, se ha prohibido el uso de microplásticos añadidos intencionadamente en cosméticos, una decisión que refleja el compromiso de la UE con la protección ambiental y la salud pública. Esta prohibición es un paso adelante en la reducción de la contaminación por microplásticos y en la promoción de alternativas más seguras y sostenibles.
Continuemos con los consejos para reducir estos impactos…
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Apoyar a las empresas responsables
Buscar y apoyar a las empresas que se comprometen a reducir su impacto ambiental y que invierten en soluciones sostenibles es una forma de fomentar un cambio positivo en la industria. En el marco de la responsabilidad será indispensable reparar en las condiciones laborales y ética de la empresa, apoyando aquellas que favorezcan una economía sostenible. Recuerda la perspectiva Km0, que busca apoyar comercios locales o de proximidad. La prosperidad de nuestra comunidad está en nuestras manos. ¡Anímate a buscar en los comercios de tu localidad estas opciones!
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Educación y concienciación
Informarse y difundir conocimiento sobre el impacto de nuestros hábitos de consumo en los océanos puede inspirar a otros a tomar medidas y contribuir a un cambio colectivo. Esta publicación pretende no solo generar un cambio en tus hábitos sino generar una transformación colectiva. Y aquí es donde tú eres protagonista. Difunde lo aprendido, sensibiliza a tus familiares y amigos y trata de inculcar hábitos sostenibles en tu entorno. Seguro que el medio ambiente y estas personas te lo agradecerán.
Al tomar estas medidas, no solo protegemos la salud de nuestros océanos y la vida marina, sino que también aseguramos un futuro más sostenible para las próximas generaciones. Cada acción cuenta, y juntos podemos hacer una gran diferencia en la preservación de nuestros preciados océanos.
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